El reciente aumento en la actividad
sísmica en
el volcán Sotará, Colombia,
obligó a las autoridades a elevar el nivel de alerta de amarillo (agitación) a
naranja (erupción de advertencia) el 8 de agosto de 2012.
El aumento se había detectado el
24 de junio de 2012 y desde esa fecha, 6891 terremotos se han registrado, es
decir, un promedio de 150 sismos por día. La mayoría de ellos (5.177) son de
magnitud muy pequeña, pero las restantes 1714 fueron los terremotos de energía
significativa (magnitudes locales 0.1-2.2) y se concentró en un área
comprendida entre 0,1 y 5 km al nordeste de la cumbre volcánica, a
profundidades de entre 2 y 6 km. Ninguno de estos eventos fueron sentidos por
los habitantes de las comunidades aledañas al volcán Sotará.
La red de la deformación muestra
un proceso de una posible inflación hacia el sector noreste del volcán, que se
correlaciona con la zona epicentral de la sismicidad reportada y sugieren que
el magma se eleva allí, y podría (o no) dar lugar a una erupción en un futuro cercano.
Durante el mes de julio de estudios geoquímicos no mostró cambios
significativos en las temperaturas de las aguas termales de la zona. INGEOMINAS
hace hincapié en que esta actividad no suponga un peligro inmediato para las
comunidades cercanas del volcán.
Sin embargo, debe decirse también
que esto podría cambiar rápidamente.
La ultima fecha de la erupción de
Sotará es desconocida.
Volcán Sotará, también conocido
como Cerro Azafatudo, es una poco conocida andesítica-dacítica estratovolcán
situado a unos 25 km al SSE de la ciudad de Popayán en el sur de Colombia, SW
del volcán Puracé. Tres calderas, 4.5, 2.5 y 1 km de diámetro, se encuentran en
Sotará, dando a la cumbre de un perfil irregular. No hay erupciones históricas que
se conozcan de Sotará, sin embargo en la actualidad el volcán presenta
actividad fumarólica.
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