Una joven de 19 años denunció que logró escapar de un
hombre y su madre que la tenían como su esclava sexual y la golpeaban. También
asegura que la obligaron a tener un bebé.
Steven Elliot Johnson, el joven detenido por el caso,
sonríe ante las cámaras de la Policía.
Desapareció en 2010, cuando apenas tenía 16 años. Su familia
la buscó desesperada pero nunca más supo de ella hasta hoy. Según informan
medios de Illinois, Estados Unidos, una adolescente logró escapar de sus
captores que la mantuvieron secuestrada y abusaron sexualmente de ella durante
los últimos tres años.
La historia que recuerda a
los casos de Natasha
Kampush y del Monstruo de Amstetten, ocurrió en el
pequeñísimo condado de Washington Park, en el Estado de Illinois. Sus 4.200
vecinos aún no salen de su asombro y hace unos días es de lo único que hablan.
La semana pasada, según se
supo ahora, una joven de 19 años logró escapar de la casa en la que estaba
cautiva y dar con la Policía local a la que le reveló su historia: los últimos
tres años fue violada a diario por un hombre que hoy tiene 25 y que, según la
víctima, recibió la ayuda de su madre.
Identificado como Steven
Elliot Johnson, el hombre fue acusado por ahora de agresión sexual agravada
junto con otros cuatro delitos. Y su mamá, Owida Johnson, de 54 años, de poner
en peligro a un menor. La Justicia les fijó una fianza de dos millones y 15.000
dólares respectivamente.
La adolescente asegura que
estuvo cautiva los últimos tres años en condiciones deplorables. La Policía lo
corroboró. Primero encontró a la joven entre sus archivos de desaparecidos y
luego fue hasta la casa del hombre y pudo comprobar cada detalle que dio la
chica que tuvo un hijo con su captor.
Un equipo especial de SWAT
irrumpió en la casa, recuperó al bebe que tiene dos años y detuvo al hombre y a
su madre.
El jefe de Policía David
Clark dijo que la adolescente conoció a Johnson hace tres años y la invitó a su
casa pero que una vez allí ya no la dejo salir más. Según la jovencita, Johnson
la golpeaba y era su esclava sexual y que las veces que trató de escapar la
hizo volver a punta de pistola. El equipo de SWAT halló en la casa armas y
drogas.
En tanto, la familia de
Johnson asegura que la joven era su novia y que fue a varias reuniones
familiares. La madre, Owida Johnson, declaró: "Fui buena con ella. La
ayudé. Ella contaba que había vivido en una casa sin agua, luz ni gas. Y que
sus hermanos y su familia no se ocupaban de ella. Hace unos meses le dije que
obtuviera su certificado de nacimiento y su número de seguro social para que
pudiera conseguir un lugar donde vivir porque no podía seguir conmigo por
siempre".
El fiscal del condado de St
Clair, Brendan Kelly, que interviene en el caso dijo: "Aún estamos
tratando de determinar qué demonios ha ocurrido". El hombre podría ir
hasta 30 años preso.
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