Los dulces, el cigarro y los refrescos son los enemigos
mundialmente conocidos de los dientes. Sin embargo, existen otros hábitos tan
comunes que ni siquiera nos damos cuenta que también pueden deteriorar su
apariencia y cuidado.
Según la revista Health, estas 6 prácticas ocupan un buen
porcentaje de las consultas dentales, así que revísalas y ve si tú también
cometes algunos de estos crímenes a la salud bucal.
La boca seca
¿Cuántas veces al día tomas agua? Si la respuesta es
poca, ¡aguas! Porque la boca seca promueve la proliferación de bacterias que
causan las caries. ¿Qué hay que hacer? Tomar agua suficiente para producir más
saliva. La saliva ayuda a tener dientes sanos y fuertes, porque además de
limpiar, neutraliza los ácidos propios de la boca. Otra forma de aumentar la
producción de saliva es haciendo enjuagues bucales o masticar chicle sin
azúcar.
La diabetes
Si padeces esta enfermedad, es importante que cepilles
los dientes varias veces al día. De preferencia, terminar la limpieza con hilo
dental. Esto porque la diabetes reduce la resistencia a las infecciones, por lo
que eres más propenso a los problemas de encías
Cepillarse luego
Desde pequeños nos enseñan a lavarnos los dientes
después de comer y la realidad es que no deberíamos hacerlo de inmediato. ¿Por
qué? Porque algunos alimentos tienen un alto contenido ácido que no se elimina
tan fácilmente con el cepillado, por ejemplo los jugos cítricos, las bebidas
con alcohol, el café o el vino. Lo mismo sucede con el vómito y aunque la
sensación de tener la boca sucia es espantosa, lo mejor sería neutralizar esos
ácidos primero.
¿Cómo? Enjuagando la boca con agua y esperar 1 hora para
cepillarnos con pasta de dientes y así prevenir erosiones.
Bebidas energizantes
Si eres de los que no suelta su bebida energizante para
hacer ejercicio, ten cuidado. Estas bebidas son muy populares, pero abusar de
ellas podría causarnos problemas dentales. Sus niveles de pH y alta
concentración de componentes ácidos aumentan el riesgo de erosiones dentales,
lo que puede desgastar el esmalte de los dientes. Además, suelen tener azúcares
que sirven de alimento a las bacterias productoras de ácido, lo que puede
traernos caries y eventual caída de los dientes.
Pastillas anticonceptivas
Está demostrado que las pastillas para prevenir embarazos
pueden traer infecciones e inflamación en las encías, como la gingivitis.
También se cree que las mujeres que utilizan este método anticonceptivo tienen
una cicatrización más lenta luego de extracciones dentales, lo que puede
provocar mal aliento e infecciones.
Bruxismo
Se le llama así al transtorno del sueño donde las
personas tienden a rechinar o apretar los dientes mientras duermen,
generalmente como consecuencia del estrés o ansiedad. Esto no sólo provoca
dolores en la mandíbula, también desgasta el esmalte dental y aumenta la
sensibilidad en los dientes, aún cuando tienes una sonrisa sana. Si sufres de
bruxismo, consulta con tu dentista si es necesario que te dé un protector bucal
para la noche.
Como dato extra, la pasta de dientes contiene además de
flúor, yeso, óxido de titanio, algas y formaldehído, componentes que no son
buenos para tu salid, así que después de cepillarte ¡no te la comas!
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